marzo 13, 2014

Volver

De tanto en tanto, me gustaría volver, no para volver, 
simplemente para echar un vistazo a lo que fue, a lo que era.
De tanto en tanto, pienso que el tiempo nada tiene que ver con el tiempo.
Yo sigo estando allí, de donde insisten que me fui, y estoy aquí donde yo niego que he venido.
Que todo tiempo pasado fue mejor alegan algunos, y yo me siento en la orilla de un tiempo que por mucho que lo interrogo no logra dar con lo mejor o lo peor.
Que muchas historias podrían ser la mejor historia, que a veces basta una, pero ¿qué hago con tanta historia que espera ser?
No me gusta volver pero vuelvo. No me gusta mucho llorar pero lloro. Pero sobre todo, no me gusta hablar pero hablo.
Creo firmemente que hablar es trastornar los tiempos. Hablar es ese conjuro mal confeccionado, ese traje de novia muerta demasiado pronto.
Y claro, de tanto en tanto me pasa preguntarme qué sería de mí si vuelvo y descubro que he dejado de cantar por la noche y de llorar por la mañana.